Ya es hora, dijo Eliot.
Y el canto fue de auroras,
de cristales,
puso alas en mis ojos,
puso antorchas,
sembró especias y galaxias.
Reflexioné. Ya es hora.
Y arrojando el estandarte gris,
me despojé de ataduras fatuas.
de Lina Caffarello, Buenos Aires, Argentina
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2 comentarios:
Muy bien capturada la epifanía, el instante de la revelación. Brillante.
Francisco Arroki
un poema que eleva con con su fuerza de fe y un final que sostiene. susana zazzetti.
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