Los fantasmas
arrecian
cuando la luna
atesora miserias.
No son el cuco
ni el hombre de la bolsa
sino verdaderos monstruos
que asedian sin
dar respiro.
Ni una canción de cuna ni un espantapájaros
apaciguan
las sombras del alma.
de Nora Patricia Nardo, Buenos Aires, Argentina.
De "Relatos de la piel".
__________________________________
5 comentarios:
Bello y real, quién no tiene sus propios fantasmas?
Malala
.
así es, adhiero al poema y sobre todo, a tu final tan de certezas. susana zazzetti
Agradezco la publicación realizada tan gentilmente por Lina y Juan José, como así también la lectura y comentarios de Susana Zazzetti y Malala.
Esa primera estrofa es muy fuerte y condice con el remate. Muy buen material.
César Argüello
Gracias Cesar por tus palabras, me alegra que te haya interesado el poema.
Saludos
Nora
Publicar un comentario