Mi
ciudad habitual, su circunstancia
albergó un
tiempo,
un
limitado espacio de suave musgo,
de
líquenes trepando paredes devastadas.
Un
oculto paisaje de humedades remotas.
Amaneciendo
sueños, llanuras desprovistas,
Fui
creciendo las horas de luna y de letargo.
¿Qué
fue de aquella infancia de bosques?
¿Qué se
hizo aquella risa de maíz
abierta en
la mañana?
Apenas
queda un gesto.
La vaguedad
de sombras
presentidas
y ausentes.
Apenas la memoria.
de Beatriz
Schaefer Peña, Buenos Aires, Argentina
De “Ciudades en palabras”.
Biodata: http://biografiadelosautores.blogspot.com/2006/06/beatriz-schaefer-pea.htmlE-book: http://www.gruponemesis.com.ar/digitales/Ciudades%20en%20palabras%2010%2017.pdf
3 comentarios:
Interesante poética que se eleva desde la nostalgia de tiempos pasados.
Ignacio Salazar
Me encanta este poema, así como también todos los otros de Beatriz que tuve oportunidad de leer. Felicitaciones y un gran abrazo. Eugenia.
bello, muy bello poema, siempre nos queda la memoria. j.dalesio
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