Circunspectos,
pero sonrientes,
escuchadores
en sus marcos,
los
abuelos en blanco y negro,
en color
las demás generaciones.
Alineados
interlocutores,
están
cómodamente colocados
sobre la
cómoda,
para que
no me olvide de conversarles.
Ayer les
regalé fresias
para
anunciarles otro equinoccio.
De "De vida y milagros".
Entrevista: http://apoalunaenlozadaradio.blogspot.com.ar/2012/05/dialogos-con-beatriz-olga-allocati.html
2 comentarios:
Lindo poema, cariñoso y lleno de recuerdos, costumbres que hoy por hoy se van olvidando. Saludos.
Sofía Molina Hidalgo
Todo un homenaje a esos "interlocutores" silenciosos.
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