
invento pecados en cada esquina con olor a perro
tormenta agridulce en la piel.
Uncida a tí como fecundo sueño,
invento un corazón de simples sombras
y te hundo en el abismo de mi tierra primigenia.
Ahora el amor es una ciudad furiosa
donde todas las mañanas mis besos cohabitan en tus muslos
alfabetos secretos muestran secretos alfabetos
socaba tu desnudo acero en la eternidad de mi laberinto
liando humedades en el roto polvo de mi espejo.
de Lina Zerón, México
Texto que forma parte de su libro "Ciudades donde te nombro".
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1 comentario:
Pues como fiera quiero deciros que este poema es buenísimo!
Gracias
Lourdes Mancilla de Madrid!
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