28.5.21

El hombre triste

 

De todos los hombres que conozco
el hombre triste es distinto,
el hombre triste no vive en júbilo
ni viaja en automóvil        
por eso riega una rosa
al tiempo que enhebra su gloria.
El hombre triste tiene memoria,
la memoria de un rostro
que alguna vez lo olvidó
entre sales y desiertos.
A ese hombre triste
de corazón lento y adormilado,
la vergüenza no lo acuchilla
y no lo asusta la derrota.
El hombre triste es así,
lleva un crespón en el alma
y algunos besos no resueltos,
como un soldado se perdió
después de tanta lucha en la trinchera.


Paula Winkler, CABA, Argentina
De Cuentos perversos y poemas desesperados”. 
Biodata: https://www.ensayistas.org/filosofos/argentina/winkler/
Reportajehttps://www.lexia.com.ar/Reportaje-Paula-Winkler.html

9 comentarios:

Rolando Revagliatti dijo...

Complacido con la lectura de este poema, ahora, tal como en otra oportunidad lo recorrí, Paula. Y qué bien: en El Escribidor.

Osvaldo Santana dijo...

Ciertamente es un gusto leer este poema. Saludos.

Marisol Mounier dijo...

Un planteo presumible y muy interesante!!

Matías dijo...

Hermosísimo poema, querida Paula; y emocionante. Realmente me ha impresionado; el final, golpea y concluye sin remisión, perdidos como estamos en la trinchera. Enhorabuena. Gracias por ofrecérnoslo.

Anónimo dijo...

Bello, bellísimo. Me encantó leerlo.

Marta Colomaro.

Magdalena dijo...

Muy bueno, Paula. Ahonda poéticamente en el alma de este hombre triste.

Jacinta dijo...

¡Qué sensibilidad! ¡Qué hallazgo! Una belleza tu mirada. ¡Gracias!

Analía Pascaner dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Analía Pascaner dijo...

Tanta melancolía en tus palabras, gracias Paula, un gusto leerte.